Hasta ahora las bibliotecas han sido la cenicienta de las Corporaciones, una especie de florero cultural que había que tener. Jamás se han tomado en serio el tema de la cultura y siempre la han entendido como algo folklórico…
En cuanto a los criterios de profesionalización en el ámbito bibliotecario, a parte de que no garantiza en nada la buena gestión, habría que normalizar este tipo de estudios y exigirlos a la hora de cubrir plazas. Tampoco a los bibliotecarios hay que eximirlos de culpabilidad en cuanto a la situación tan lamentable que presenta el sector. En fin, nadie estamos libre de culpa, pero lo que si tengo claro es que un criterio básico a la hora de trabajar en una biblioteca es algo tan elemental como el “amor a los libros”, lo que antes se entendía como vocación, que al parecer no está muy generalizado yasí nos va.
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Por: Joherg
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